Reseña “Sobre la Libertad” John Stuart Mill
Afirmación Principal:
La realidad que se ha
vivido a lo largo de los tiempos y las latitudes es que la prensa, en numerosas
ocasiones, ha sido censurada, reprimida y perseguida, por aquellos a quienes
afectan los escritos de los críticos. La opinión de varios
filósofos como John Stuart Mill es que debería existir la completa libertad de
profesar cualquier doctrina y que el poder de coerción ejercido por cualquier
persona o institución es ilegítimo.
Introducción:
El libro enuncia que lo malo de imponer silencio a la expresión de opiniones radica en que
supone un robo a toda la especie humana; tanto a la generación actual como a las
posteriores, a los que refutan y a los que sustentan la opinión, a los que se
les priva de la oportunidad de dejar el error y a los que pierden la utilidad de
tener una percepción más clara y más viva de la verdad.
Cuando alguna autoridad intenta
suprimir la opinión opositora, ella asume que es infalible y que tiene el derecho
para decidir el asunto por toda la especie humana. Pero se equivoca, porque nadie
puede afirmar que posee la certeza absoluta.
Aunque la postura errónea
de un hombre se propagara, la sociedad ganaría más con sus errores que con la
profesión ingenia de opiniones ajenas. Además, las opiniones falsas ceden
gradualmente ante los hechos y los argumentos; pero para que éstos produzcan
algún cambio, es necesario que se presenten opiniones diferentes. Por este
motivo la libertad de pensamiento y la libertad de prensa son necesarias para el
buen desarrollo de la sociedad moderna.
Desarrollo
del Documento:
El regalo más bello y
benéfico que se puede hacer a la humanidad es revelarle algo que le interese
profundamente y que ignoraba.
La Historia nos muestra que
la verdad, muchas veces, ha sido reducida a silencio por la persecución; y si a
veces no se la ha suprimido de modo absoluto, al menos ha sido retardada por
décadas o siglos. Por eso la persecución ha sido uno de los medios más eficaces
que se han utilizado para dominar a los demás.
Pero la ventaja que posee
la verdad consiste en que, cuando una opinión es verdadera, aunque haya sido
rechazada en múltiples ocasiones, reaparece siempre, hasta que en llega a una
época en que escapa a la persecución y adquiere la fuerza necesaria para expandirse.
El problema actual de la
libertad de expresión no se basa en malos tratos como en otros tiempos; sino en
nuestra intolerancia que induce a los hombres a esconder sus opiniones o a abstenerse
de manifestarlas y propagarlas. La intolerancia es tan arraigada en nuestra
cultura que la total libertad religiosa, de pensamiento y de prensa no ha
existido casi en ninguna parte.
La libertad de pensamiento no
es única o principalmente para formar grandes pensadores. Al contrario, es para
hacer que la mayoría de las personas sean capaces de visualizar y creer en la grandeza
que pueden alcanzar.
Posición
Crítica:
“No
hay libertad de renunciar a la libertad”. John Stuart Mill
Esta frase es muy cierta,
la libertad es una característica principal de la especie humana, es uno de los
rasgos que la distinguen de los demás animales. Es un bien al cual nadie puede
renunciar, el hombre es intrínsecamentelibre y no puede dejar de serlo. La libertad es la capacidad de ser y
de hacernos desde nosotros mismos. Por ella cada uno se “engendra” a sí mismo;
cada acto de libertad nos deja una huella que marca directa o indirectamente
nuestra vida.
Sin embargo, existen dos
posibilidades de la libertad:
1)
La
libertad que quiere realizarse empleando su potencial para enriquecerse a sí
misma convirtiendo todo en medios para disfrutar.
2)
La
libertad que escoge el camino de la entrega de sí misma a los demás y se abre a
lo que los demás quieran darle libremente.
Nosotros podemos y debemos elegir
el camino que más convenga a nuestros interese y gustos; pero siempre hay que
tener en cuenta a nuestros congéneres que viven a nuestro alrededor. Además, es necesario
orientar la libertad, porque si falta la verdad,
no sabremos a dónde dirigirnos, ni qué debemos hacer para llegar a donde
queremos.
La única libertad que
merece este nombre es la de buscar nuestro propio bien a nuestra propia manera,
en tanto que no intentemos privar de sus bienes a otros, o frenar sus esfuerzos para obtenerla.
¡VIVA LA LIBERTAD DE
PENSAMIENTO!
¡VIVA LA LIBERTAD DE
EXPRESIÓN!